Secuestrados:
Farc, 50; Eln, 6; delincuencia común, 23 y Auc, cero.
(Harlan Henao, cabeza de Fondelibertad)
El Tiempo, 21 de marzo del 2010
Vuelve en su apogeo, para hacer delirar a la platea, el circo palaciego. La actuación estelar, a cargo del Dandino criollo, el mago de Salgar. Para anunciar las últimas funciones de su actuación de 8 años, ahora hacen desaparecer secuestrados, como convirtieron asesinatos selectivos, en ¨Falsos positivos¨; llaman a los desplazados, migrantes; institucionalizan la limosna como una política de Estado; no se inmutan con los negocios fantásticos y poco claros en los que unos vivos, convierten terrenos devaluados en fantásticas zonas francas, con valorizaciones inimaginables.
Gastan todo el presupuesto nacional en guerra; desbaratan billones en un asistencialismo alcahueta y politiquero; promocionan la guerra, como una política, en el país del Rambo indiaca; convierten universitarios, que esperanzábamos, masa pensante, en vulgares sapos a sueldo; transforman los fondos de los contribuyentes, (Acción social), en la forma hipócrita y disimulada, bien planeada pero indecente, de remplazar los que eran auxilios parlamentarios, tan mal utilizados. Corrupción en el más alto grado de sofisticación. Basura politiquera, convertida en política de Estado.
El anuncio lleno de bullicio, para que nadie piense, se interrogue, dude. Mentira metida con vaselina, delirio de la platea, que posesa, aplaude y se emociona en este trance hipnótico, en el que las mentiras parecen verdades y la magia parece verdad. La trampa esta muy bien camuflada.
Las casas de citas políticas están de fiesta; toda la indignidad de las raposas que nos gobiernan, está en ebullición. Continuamos en manos de piratas, funcionarios filibusteros, ahora mas sofisticados, mas preparados para no dejar rastros, volver invisibles las pistas; mas mentirosos, mas cínicos. Puede un país así, ser viable? ! No !
Mientras el Ubérrimo se deleitaba, presentando a ¨Morcilla¨, las listas de secuestrados, colombianos sometidos al mas inhumano de los crímenes, fueron reducidas en los fríos laberintos oficiales, para decirnos que son poquísimos, que las cifras han salido del mas riguroso estudio. ! Burócratas insensatos y mentirosos !
Las cuentas parecen convincentes, pero no lo son. Encierran varias contradicciones, son manipuladas, mostrando una realidad que no existe. Es la versión de última edición de un mundo de fantasía que no tenemos, de una realidad que está lejos de ser la verdad. Es lamentable desgracia que los entes encargados de hacer las « depuraciones oficiales », le quieran meter al país una información falsa, que parece verdadera, presentada con sofistería artera, para mostrar una realidad que no tenemos y de la que estamos lejos en muestra sufrida Colombia.
Esa « depuración » de bases de datos, sin el rigor de lo que se puede probar inequivocamente, no es mas que una farsa, para presentar a incautos, una visión de la realidad colombiana, como ella no es. En eso es experto este gobierno, sin retenes morales, ni frenos éticos (inventarle un complot a un Magistrado Auxiliar de la Corte Suprema, porque hace un trabajo que muestra la realidad de las purulencias del régimen, que en éxitos de guerra esconden la realidad de nuestro país), con índices de pobreza, aumentados pero distorsionados; con cifras amañadas en salud, que en cualquier país decente, causarían, esas si, una hecatombe social.
Al Ubérrimo no le importa. Por encima de la realidad cruda, usando su innegable arte en el manejo de la publicidad política, haciendo suyos todos los voceadores del régimen: periódicos y noticieros parcializados, vendidos o comprados como putas al mejor postor, el culto a la favorabilidad, el mesianismo enfermizo, que todo lo controla y todo lo manipula.
Los escasos éxitos de este gobierno, que hay que reconocerlos, quedan opacados con esa maraña de corrupción, que ha superado a todos los gobiernos corruptos que lo antecedieron.
Funcionarios públicos cuestionados, carentes de ética y moralidad, elevados a la categoría de prohombres de revistas de farándula, cuando en realidad son parásitos del régimen y el presupuesto. Pocos de ellos, bárbaros técnicamente bien preparados, sin principios, ni límites. Hombres y mujeres, para los que todo vale, en ese objetivo mezquino de presentar resultados, aunque sean falsos.
No pocos de ellos vuelven al Congreso de la República, entrega de última edición de todas nuestras purulencias, de todos nuestros desvaríos como Nación, convertida por esos personajes de baja estofa, en un rincón, en el que el crimen si paga, la mentira es una virtud, el engaño una cualidad y la arrogancia un título nobiliario, de esta clase política emergente, amamantada en los senos de lo mas corrupto de nuestra sociedad: La policlase, esa que produce vergüenza y que nos cuesta tan caro, por actuaciones y procederes tan baratos.
No podemos dejar de reconocer que Uribe cambió la manera de hacer política en Colombia; que creó una confianza en Colombia, desafortunadamente apuntalada en la peor de las formas de hacer política, pero la mas requintada forma de hacer politiquería. Pasará sin duda a la historia, como el mas popular de los presidentes, pero su presidencia estará lejos de ser la mas transparente, la mas limpia, la mas ética, la mas decente.
En sus dos períodos construyó un culto a la personalidad, con su trabajo de hormiga incansable, con sus conspiraciones para desacreditar los otros poderes, con sus manipulaciones de las entidades de control, entregadas en bandeja a hombres sin tripas, que portando estandartes de cruzadas moralizadoras, falsas por supuesto, nos retroceden al medioevo político.
Sería excelente que ese informe amañado y sesgado, para presentar la realidad como no es, fuera cierto, pero no es cierto. Tiene muchos cuestionamientos y una metodología que no resiste una revisión en profundo, de la realidad distinta que vivimos.
Pobres esos miles de secuestrados, víctimas del peor de los crímenes, eliminados de las estadísticas, por burócratas crueles. Ya llegará el despertar y nos enfrentaremos a la realidad escondida, de una Colombia distinta, a esa que nos quieren hacer créer, tenemos.
!Adelante Presidente! En el Ubérrimo, usted volverá a ser lo que es, un chalán, con pulso firme. Ojalá allá, no se le derrame el café, cuando monte en sus corceles y comience su ostracismo, ese que lo dejará desnudo, sometido a la resurrección de la verdad, bien perdido, durante los últimos 8 años de esta sufrida Colombia.
